¿Te conoce?

¿Te conoce?

Quiero preguntar, más por celos que por interés.

Ella, con la que estás, ¿te conoce?

¿Sabe cuando tus vacíos se abren y comienzas a llorar? ¿Ha visto cómo te desesperas cuando algo no te sale bien? 

A caso es que ya se ha sentado a debatir sobre el universo que llevas en los ojos… si es así puedo aceptar la derrota.

Es que juro por lo que más quiero, que eres tú, que no se ha tomado la molestia de ver al abismo que te comprime el alma cada noche. Que no ha siquiera intentado aliviar tus miedos y que si los ha alimentado. 

Quiero darle una lista con los pasos a seguir para amarte y que te sientas amada, maldita sea, estoy mintiendo como tantas veces, no quiero darle ni mierda que le ayude a tenerte, pero si quiero decirte que te conozco y que muy a pesar de que eso no es una certeza, quiero seguirte conociendo, con la excepción enorme de que ahora te encuentras con alguien que claramente no soy yo, aunque quiera. 

Eres un ser poco común, me atrevería a decir que no he visto nada que siquiera se parezca a ti y a tus andanzas, vas y vienes derrochando lo que eres y no te das cuenta del efecto que tienes en los demás, bueno o malo eso no te importa, te mereces el mundo y cada día lo consigues de maneras distintas, ni la rutina es monótona a tu lado y no lo puedo entender, pero si lo disfruté.

Ahora solo soy como un asesino pasional arrepentido de dejarte ir, léeme bien, ¡dejarte ir! Jajaja como si de verdad fueras a preguntarme si te quiero soltar. Sé que mucho tiempo quisiste estar conmigo y que yo decidí que no iba a ser, que no te quería perdonar y dejarte era mi única opción, mediar las cosas no fue algo a lo que me haya aferrado, dejé que el amor se apagara en ti y que buscaras otros labios y otras pieles, los odio como si hubieran allanado mi hogar y me hubiesen despojado de todo lo que me pertenecía, vulgar es lo que soy, jugando a ser tu dueña. 

Ella debe de saber muchas cosas, es que eres un mar nada simple, debe verte constantemente como un punto de quiebre entre el sentido que tenía su vida antes y después de ti, si creo que nadie es porque sí, sencillamente eres el ejemplo más claro con el que me he topado.

Veo tus inseguridades, tu inquietud, tu constante sentimiento de abandono, como vibra tu pecho y brillan tus ojos con la música, cómo tu rabia se vuelve salvaje y estalla sin más, admiro tu sensualidad y me pudre cómo la ignoras, desbordas esos aires de grandeza que sencillamente mal no te van, porque eres increíble, impaciente, impactante, imparable, como el tiempo. 

Quiero saber si ella ve en ti lo que tu eres para mí, si observa tu arte y lo valora.

La voy a enterar de lo que yo he sido en tu vida y no quiero que haya reclamos al respecto, es que si no te ha hecho arder, si no te ha visto correrte, sencillamente no sabe nada de ti, puede parecer banal e insuficiente, pero no contigo, no con la fuerza que llevas dentro, no con tu suspicacia y las fantasías que se hacen realidad en tus brazos, entre tus piernas, la quiero retar a ser mejor que yo, quiero perder esta batalla, mi ego es grande pero sé que no has tenido alguien que supere eso que fuimos.

Pero, dime, ¿sabe que tu eres fuego y si yo soplo, ardes?